¡Cuidado niños! Pornografía explícita

Quiero informar de que, para poder someterme mejor a los deseos de la pareja formada por la sociedad de consumo y del mercado del arte, voy a cambiar mi postura. Así se me tendrá un mejor acceso y podrá penetrárseme por todos los orificios y hasta el fondo. -"Si, si, ah ah aahhh, dadme máááááss..."- Me gusta, lo estoy gozando.

Son tiempos de humillarse y en este momento ya estoy doblegado. Me dejo dominar y acepto de buena gana las vejaciones y el insulto mientras se me empotra. No me duelen las embestidas, por más que quieran dilatarme. Soy un profesional sin rubor y no me avergüenza porque me gustan las indecencias que me propone el destino. Se me puede mancillar sin recato. -" AAaahhh !OH YES, oh my God!! si, si si, máááss...."-

Así que mi nueva postura es la siguiente:

Voy a bajar los precios de mi trabajo hasta los veinte euros por foto original pintada a óleo. Solo existen dos unidades de cada foto y no firmaré ni una más. Además, por cada foto vendida, se descontará en cada uno de los bares en los que se están celebrando simultáneamente mis exposiciones, el precio de un café solidario, de modo que personas en difíciles circunstancias que estén siendo enculadas por ese consolador gigante de la sociedad de consumo, puedan tomarse un café caliente si no tienen otra posibilidad.

Eso sí, ya no me rebajaré más porque, aunque asumo mi prostitución como parte del pago por existir, no accederé ni a lluvias doradas ni a la coprofágia. Por eso, el día 30 de Junio, coincidiendo con mi cumpleaños, procederé a quemar en la vía pública el trabajo que aún me quede pendiente colgando de las paredes.

-"...Siiii, mmmm..."- Aquí termina el polvo. Podéis limpiaros e iros a casa tranquilos porque no tengo el VIH.

Ah, y no os preocupéis porque nadie se va a enterar si habéis usado mis servicios. Soy absolutamente discreto.